miércoles, 15 de julio de 2015

Se descubre gemelo de Júpiter alrededor de un gemelo solar

Un equipo internacional de astrónomos ha utilizado el telescopio de 3.6 metros de ESO para identificar un planeta igual a Júpiter orbitando a la misma distancia de una estrella como el Sol, denominada HIP 11915. Según las teorías actuales, la formación de planetas con masas semejantes a Júpiter juega un importante papel en la configuración de la arquitectura de los sistemas planetarios. La existencia de un planeta con masa y órbita similares a Júpiter, alrededor de una estrella como nuestro Sol, abre la posibilidad de que el sistema de planetas alrededor de esta estrella pudiera ser similar a nuestro propio Sistema Solar. HIP 11915 tiene aproximadamente la misma edad de nuestro Sol y, además, la similitud de su composición sugiere que podría haber planetas rocosos orbitando más cerca de la estrella.


Hasta ahora, los sondeos para encontrar exoplanetas han sido muy sensibles a los sistemas planetarios habitados por planetas masivos en sus regiones internas, cuyas masas son un poco mayores a la Tierra [1]. Ello contrasta con nuestro Sistema Solar, donde hay pequeños planetas rocosos en las regiones internas y gigantes gaseosos, como Júpiter, hacia el exterior.

De acuerdo a las teorías más recientes, la disposición de nuestro Sistema Solar, tan propicio para generar vida, fue posible gracias a la presencia de Júpiter y a la influencia gravitacional que este gigante gaseoso ejerció sobre nuestro Sistema Solar, durante el período de su formación. Parecería, entonces, que el hallazgo de un gemelo a Júpiter es un importante hito en la senda para encontrar sistemas planetarios análogos al nuestro.

Un equipo liderado por Brasil se ha enfocado en las estrellas similares al Sol, en un intento por hallar sistemas planetarios similares a nuestro propio Sistema Solar. El equipo ha descubierto ahora un planeta con una masa muy similar a la de Júpiter [2] orbitando una estrella como el Sol, HIP 11915, a casi exactamente la misma distancia de Júpiter. Este nuevo descubrimiento se logró utilizando el instrumento HARPS, uno de los cazadores de planetas de mayor precisión a nivel mundial, instalado en el Telescopio de 3.6-metros de ESO, en el Observatorio La Silla en Chile.

Si bien se han encontrado varios planetas similares a Júpiter [3] a diversas distancias de estrellas similares al Sol, este planeta recién descubierto, en términos de masa y distancia a su estrella anfitriona y similitud entre la estrella anfitriona y nuestro Sol es el análogo más exacto encontrado hasta ahora para el Sol y Júpiter.

La estrella anfitriona, la gemela solar HIP 11915, no sólo es similar al Sol en masa sino que, además, tiene casi la misma edad. Para reforzar aún más las semejanzas, la composición de la estrella es similar a la del Sol. La impronta química de nuestro Sol puede parcialmente estar marcada por la presencia de planetas rocosos en el Sistema Solar, sugiriendo la posibilidad de planetas rocosos alrededor de HIP 11915.

Jorge Melendez, Universidad de Sao Paulo, Brasil, líder del equipo y coautor del artículo científico, destacó que “la búsqueda de una Tierra 2.0 y un Sistema Solar 2.0 completo, constituyen uno de los desafíos más emocionantes para la astronomía. Estamos encantados de formar parte de esta investigación de vanguardia, que ha sido posible gracias a las instalaciones de observación de ESO”. [4]

Megan Bedell, de la Universidad de Chicago y autor principal del artículo concluye: “Luego de dos décadas en búsqueda de exoplanetas, finalmente estamos viendo planetas gaseosos gigantes, similares a los de nuestro propio Sistema Solar, gracias a la estabilidad a largo plazo de instrumentos cazadores de planetas como HARPS. Este descubrimiento es, en todo aspecto, una señal emocionante de que probablemente existan otros sistemas solares, esperando ser descubiertos.”

Se requerirá de observaciones de seguimiento para confirmar y acotar este descubrimiento, pero HIP 11915 es uno de los candidatos más prometedores hasta ahora, para albergar un sistema planetario similar al nuestro.

Notas
[1] Las técnicas de detección actuales son más susceptibles a planetas grandes o masivos cercanos a sus estrellas anfitrionas. Los planetas pequeños, o de baja masa, están más allá de nuestras actuales capacidades. Los planetas gigantes y distantes de su estrella anfitriona son también difíciles de detectar. Por consiguiente, muchos de los exoplanetas que conocemos hoy, son grandes y/o masivos, y cercanos a sus estrellas.

[2] El planeta fue descubierto midiendo el leve bamboleo que provoca en su estrella anfitriona conforme orbita alrededor de ella. Como la inclinación de la órbita planetaria no es conocida, sólo una cota inferior de su masa puede ser estimada. Nótese que la actividad de la estrella, ligada a las variaciones de su campo magnético, puede posiblemente imitar la señal interpretable como la impronta del planeta. Los astrónomos han realizado todas las pruebas conocidas para investigar esta posibilidad, pero es actualmente imposible descartarla por completo.

[3] Otro ejemplo de un gemelo de Júpiter es el que órbita alrededor de HD 154345, descrito aquí.

[4] El Acuerdo formal de acceso de Brasil, firmado en diciembre de 2010, ha permitido a los astrónomos brasileños pleno ingreso a las instalaciones astronómicas de ESO.http://www.eso.org/public/spain/news/eso1529/

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